Abigail, la honorable hija de los Anson, siempre ha protegido su matrimonio a pesar de que ya se está desmoronando. La única razón fue su adorable hija, Millie, y su amor incondicional por su esposo Wyatt
Sin embargo, el día más largo siempre encontraría su noche y no importa cuán hermoso fuera el comienzo, el final podría volverse tan feo y doloroso... Ninguna mujer podría perdonar eternamente la traición de su marido, especialmente cuando él tuvo en secreto un hijo ilegítimo con su ex amor.
El corazón herido de Abigail y su confianza destruida no pudieron soportarlo más. Le pidió fríamente a su esposo el divorcio, a lo que él se negó ferozmente, lo que resultó en una gran pelea e innumerables malentendidos.
Ella no se rendirá. No se rendirá. Abigail había llegado tan lejos y no permitiría que su esposo la arruinara por completo y le rompiera el corazón a su hija.
Sin embargo, Wyatt tampoco lo dejará ir, sin importar a dónde los lleve.
***
- Ni se te ocurra divorciarte de mí, Abigail.
“No hay manera de que te deje ir. Estás destinada a sufrir conmigo. Eres mía”.
